Cuando Katy Perry lanzó el éxito
pop I Kissed a Girl and I Liked It en 2008, inició un debate en todo el
mundo...
"¡La verdad sea dicha, hice
más que eso!" Dijo la cantante la audiencia de la gala del 207 HRC, en Los
Ángeles, mientras que aceptaba el premio nacional de la igualdad este sábado
por la noche.
"En ese momento no sabía
muchas cosas de la vida. Lo que sí sabía era que tenía curiosidad, mucha, e
incluso entonces sabía que la sexualidad no era tan blanca como el vestido que
llevaba", agregó.
"Pero en 2008, cuando salió
esa canción, supe que comencé una conversación que gran parte del mundo parecía
bastante ansioso por cantarla".
Perry continuó detallando su
educación religiosa (sus padres son pastores) y cómo "rezaba a los gays en
los campos de Jesús". Pero pronto su "burbuja empezó a estallar"
y descubrió a personas que eran diferentes que ella.
"Estas personas no eran nada
como me habían enseñado a temer. Eran las personas más libres, fuertes, amables
e inclusivas que he conocido", dijo. "Ellos estimularon mi mente, y
llenaron mi corazón de alegría, y bailaron con alegría mientras lo hacían.
Estas personas son realmente magia, y son mágicas porque están viviendo su
verdad".
Aunque se alejó de las creencias
de su religión, Perry dice que no habría elegido un camino diferente para ella:
"El camino del descubrimiento me ha hecho, me ha probado y me ha cambiado
para siempre. No puedes escoger a tu familia, pero puedes elegir a tu tribu",
dijo. "Estoy aquí como una verdadera evidencia de que, sin importar de
dónde vengas, todo es acerca de hacia dónde vas, ese verdadero cambio, la
verdadera evolución, y ese cambio de percepción real puede suceder, si abrimos
nuestras mentes y ablandamos nuestros corazones".
La estrella del pop añadió que le
habría sido mucho más fácil quedarse con la "chica políticamente
correcta".
"Ya no puedo sentarme en
silencio", dice. "Tengo que defender lo que siento que es verdad y
eso es igualdad y justicia para todos, punto".
Por E!
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