Con los años, la flacidez de la
piel, las líneas de expresión y las arrugas aparecen cual terribles enemigos de
quienes cuidan con esmero su apariencia. Son signos inequívocos de degradación
y falta de producción de colágeno, que es imprescindible para conservar la piel
tersa.
El colágeno es una proteína vital
para mantener la forma y la estructura de la piel y otros órganos del cuerpo.
Si su producción se ralentiza, como sucede cuando las personas se acercan a la
vejez, la calidad de la piel se ve afectada, pierde elasticidad, se torna
rígida y reseca.
La pregunta del millón es si será
posible prolongar la etapa de producción de colágeno, revertir esos efectos
negativos y recobrar la lozanía de la piel, para mantener una apariencia joven
y sana. La respuesta es sencilla: sí, es posible.
De acuerdo con la doctora Ilse
Arias, especialista en Dermatología, de la clínica IADERMA - Unidad
dermatológica avanzada- para conservar la producción de colágeno en niveles
óptimos es necesario asumir una alimentación adecuada y llevar un buen estilo
de vida, lejos del estrés y prácticas como fumar tabaco o consumir alcohol. No
es una tarea fácil para muchos, por múltiples razones, pero se puede lograr con
gran voluntad y mucho tiempo.
“Existen también opciones basadas
en productos de altísima calidad como Radiesse®, un bioestimulador que genera
colágeno de manera natural a través de rellenos dérmicos que suavizan las
arrugas y los pliegues faciales, causando un efecto rejuvenecedor”, explica la
doctora Arias.
Radiesse® mejora la calidad de la
piel a largo plazo, reactiva a los fibroblastos como los «constructores
celulares» de la matriz dérmica e incrementa la neocolagenesis, síntesis de
elastina, proliferación celular y espesor de la piel.
El producto está hecho de diminutas
microesferas de calcio y gel a base de agua, similar a los minerales que se
encuentran naturalmente en el cuerpo, por lo que es reabsorbible, y permite
resultados duraderos.
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